Hondarribia es un municipio de la provincia de Guipúzcoa, situado en la desembocadura del río Bidasoa, y que ostenta el título de ciudad, el cual le fue concedido en el siglo XVII como obsequio por salir victorioso de las batallas de contención de las tropas francesas. La ubicación fronteriza de Hondarribia ha marcado su carácter y personalidad durante siglos. Dada su situación estratégica, fueron muchos los que quisieron hacerse con este pueblo vasco. Cada vez que estallaba una guerra entre España y Francia, Hondarribia era la primera en ser atacada por los franceses. Hasta el año 1980 el nombre oficial del municipio fue Fuenterrabía, siendo cambiado a Hondarribia en ese año por decisión del propio ayuntamiento. Desde 1989 Hondarribia es reconocida como la única denominación oficial del municipio.
En los últimos años, Hondarribia ha experimentado un gran auge culinario. Esto se debe a jóvenes chefs que, después de haber estudiado bajo la tutela de famosos cocineros vascos, han tomado sus conocimientos y se han instalado en Hondarribia. Pasear por sus calles es un deleite para los sentidos, ya que conservan la arquitectura típica de la zona, con fachadas coloridas y calles empedradas. Además, es la ciudad amurallada mejor conservada de Guipúzcoa. Por todo ellos, en este blog queremos compartir con vosotros los lugares más importantes que ver en Hondarribia en un día.
Santuario de Guadalupe
Empezamos nuestra visita por el santuario de Guadalupe, que es la patrona de Hondarribia y que se encuentra en el monte Jaizkibel, desde la que tenemos unas preciosas vistas de la bahía de Txingudi y la desembocadura del rio Bidasoa. Sus orígenes se remontan al siglo XVI y tras los asedios sufridos por la ciudad a lo largo de la historia, fue destruida y reconstruida en varias ocasiones, debiendo su aspecto actual a una reconstrucción del siglo XIX. Los habitantes de Hondarribia veneran a la Virgen de Guadalupe, que está rodeada de maquetas de barcos y objetos marinos donados por pescadores. Cada 8 de septiembre, se celebra una romería en su honor en las campas que rodean el santuario.
Puerta de Santa María
Después de visitar el Santuario de Guadalupe, bajamos a la ciudad y nos dirigimos a visitar el casco antiguo de Hondarribia, para lo cual accedemos desde la Puerta de Santa María, que era, y todavía es, la entrada principal al pueblo y que nos conduce hasta Nagusi Kalea (Calle Mayor). En ella destaca el escudo de la ciudad, del año 1694, coronado por la virgen de Guadalupe, y sobre él, el reloj de sol. A la izquierda se encuentra el Cubo de Santa María, del siglo XVI. La puerta contaba con puente levadizo, cuerpos de guardia y foso, entre otros elementos defensivos. Justo delante, dando la bienvenida a la ciudad, está la escultura del Hatxero, que representa a un zapador, que era un soldado que trabajaba en las fortificaciones.
En Nagusi Kalea se encuentran algunos de los edificios más bonitos de la ciudad, como el ayuntamiento, ubicado en una antigua construcción barroca del siglo XVIII; el palacio Zuloaga, que hoy alberga la biblioteca municipal; y la casa Casadevante, que actualmente acoge el hotel Pampinot.
Subiendo por la calle Mayor nos encontramos con la imponente iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y del Manzano, construida en los siglos XV y XVI sobre las ruinas de una iglesia romana y antiguas murallas. Aunque la construcción del edificio comenzó en 1474, duró mucho más de lo planeado, ya que en aquella época Castilla estaba intentando conquistar el Reino de Navarra y parte del material destinado a su construcción se utilizó para reforzar la muralla de la ciudad. Aunque el principal estilo de la iglesia es gótico, durante el siglo XVI se añadieron al edificio algunos elementos renacentistas, como la entrada. También destaca la torre del campanario, que es de estilo barroco (siglo XVIII), obra de Francisco de Ibero, así como el hermoso órgano que se encuentra en su interior.
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Plaza de Armas y Parador de Hondarribia
Al final de la calle mayor llegamos la Plaza de Armas, donde se encuentra el impresionante Parador de Hondarribia. El edificio que alberga este parador fue en sus orígenes una fortaleza, construida a finales del siglo X por el Rey Sancho II de Pamplona. En la actualidad se le conoce como Castillo de Carlos V, por los trabajos de restauración y ampliación que se realizaron por orden del monarca en el siglo XVI. Su ubicación en lo alto de una colina con vistas al Río Bidasoa, y la Bahía de Txingudi resulta perfecta para fines defensivos. Por esta razón, el castillo fue principalmente utilizado como cuartel y también como casa del gobernador. Por ese motivo se dice que el edificio funcionó como “palacio-castillo”. A finales del siglo XVIII el edificio fue gravemente dañado por las tropas francesas y permaneció en ruinas, hasta que fue rehabilitado y transformado en Parador Nacional en el año 1968. La plaza en la que está situado, además de las increíbles vistas sobre el río y la bahía, tiene mucho encanto y está rodeado de preciosas casas con balcones de madera, de diferentes colores.
Guipuzkoa Plaza
Después de visitar Arma Plaza y el Parador de Hondarribia, seguimos paseando por San Nicolás Kalea, otra preciosa calle del casco antiguo, llena de fachadas coloridas y pavimento empedrado. Giramos a la derecha por Harategi Kalea, y pasando bajo un arco, llegamos a Guipuzkoa Plaza. Aunque de reciente construcción, ya que data de los años 70 del siglo pasado, esta plaza conserva la arquitectura tradicional, respetando por completo el entorno en el que se enmarca, situada en pleno casco histórico de Hondarribia. Esto la convierte en un lugar ideal para la celebración de actos populares, que en la época navideña se llena de numerosos puestos y tenderetes, que aportan animación y encanto a este lugar. También denominada como Plaza de las Cadenas, es obra del arquitecto Manuel Manzano Monís.
Murallas de Hondarribia
Las murallas que rodean el casco histórico de Hondarribia, pertenecen al sistema de fortificación abaluartado, cuya construcción comenzó a finales del siglo XV y principios del siglo XVI. En esa época se incorporaron los elementos característicos de estas fortificaciones, como eran los fosos, los cubos o los baluartes. Hoy en día se conservan en relativo buen estado algunos de ellos, como los baluartes de San Nicolás, los de San Felipe y Santiago y el de la Reina (este último parcialmente reconstruido en el siglo XX). También tiene gran interés el cubo de Santa María, parcialmente conservado y situado cerca de la principal puerta de acceso al recinto murado, que lleva el mismo nombre.
También se conserva en pie otra de las puertas de acceso al casco antiguo, la de San Nicolás. Se conservan dos puertas de San Nicolás. La más antigua, perteneciente al recinto medieval, es un sencillo arco al final de la calle del mismo nombre. La más reciente, del S. XVI, tenía un puente, en parte levadizo y en parte firme, para salvar la altura existente entre la puerta y el foso. Al fondo se sitúa el revellín de San Nicolás.
Desde el puente se pude observar el baluarte del siglo XVI, es uno de los que mejor conserva su traza original y su galería contraminas. De las murallas medievales solo se conservan estructuras muy limitadas y en su mayor parte modificadas. Existe un bonito paseo por el foso de la muralla, donde poder observar el conjunto fortificado y las huellas de los impactos sufridos en las numerosas batallas que hubo a lo largo de la historia.
Barrio de la Marina
Una vez visitado el casco antiguo y la ciudad amurallada, nos dirigimos al pintoresco Barrio de La Marina. Este barrio situado extramuros surgió para albergar a los pescadores de bajura, de manera que vivieran cerca de su lugar de trabajo y no tuvieran ningún impedimento para llegar al mismo, como el cierre nocturno de las puertas de la villa. De esta manera, tuvo que dotarse al barrio de determinadas infraestructuras, para facilitar la vida cotidiana de sus habitantes. Aunque este barrio creció de manera considerable durante el siglo XX, las dos calles más importantes son las de Santiago y San Pedro, donde se agolpan las estrechas casas, que mantienen su estructura original, con fachadas de entramado de madera y ladrillo. Los balcones de madera están pintados de alegres colores, que dan un encanto especial a esta zona. Además de deleitarnos con las vistas, aquí se encuentran algunos de los mejores bares y restaurantes, donde degustar, entre otros, el famoso pintxo pote, acompañado de un buen vino de la zona.
Puerto de Hondarribia
Seguimos nuestro paseo y después de la playa de Hondarribia nos encontramos con el puerto pesquero, que es uno de los puertos de bajura más importantes de la costa vasca. Cuenta con un dique que permite el amarre de toda la flota pesquera de Hondarribia. La construcción de este puerto, junto con la nueva lonja y la reforma de la fábrica de hielo, permitieron trasladar casi todas las actividades pesqueras a este lugar, liberando el centro del municipio, para poder instalar el puerto deportivo y albergar la enorme cantidad de embarcaciones de recreo que atracan en esta turística ciudad.
Paseo en barco hasta Hendaia
Y como colofón a nuestra visita, decidimos cruzar en barco hasta la vecina localidad francesa de Hendaia, separada por la bahía de Txingudi. Esta bonita y corta ruta marítima nos permite conocer lo mejor de ambos municipios en menos de 7 minutos. Existen dos empresas que realizan el mismo recorrido, al mismo precio y con la misma frecuencia, la embarcación Rekalde, con base en Hondarribia y la embarcación Marie Louise, con base en Hendaia. Estos barcos llevan uniendo a diario estos dos pueblos vascos de forma regular desde antes de 1993. Las embarcaciones admiten perros, tablas de surf y bicicletas en la mayoría de sus trayectos, pero el trayecto queda sujeto a las condiciones de la mar, la meteorología, la afluencia de personas y la opinión del capitán, quien, a última instancia, puede prohibir el acceso de cualquier objeto o animal a la embarcación. No hace falta adquirir los billetes con antelación, ya que se compran en el momento de entrar al barco, pero sobre todo en las épocas estivales, es recomendable hacer cola, ya que se pueden producir largas esperas. Los barcos salen cada quince minutos, y os dejamos aquí los horarios, ya que cambian según la época del año.
Barco Rekalde / Leire II.
- Verano: Desde el 1 de julio hasta el 10 de septiembre, de 10:00 de la mañana hasta la 1:00 de la noche. Desde el 11 de septiembre hasta el 30 de septiembre, de 10:15 de la mañana a las 19:00 de la tarde.
- Otoño: Octubre de 10:15 de la mañana a 19:00 de la tarde (sábados y domingos hasta las 20:00 de la tarde). Los meses de Noviembre y diciembre de 10:15 de la mañana a 18:00 de la tarde.
- Invierno: Los meses de enero y febrero de 10:15 de la mañana a 18:00 de la tarde.
- Primavera: Los meses de Abril Mayo y Junio de 10:15 de la mañana a las 19:00 de la tarde (sábados y domingos hasta las 20:00 de la tarde)
Barco Marie Louise.
- Verano: Del 1 de julio al 15 de septiembre el horario es de 10:00 de la mañana a 1:00 de la madrigada.
- Resto del año: El horario se reduce de 10:00 de la mañana a 19:00 de la tarde.
Dónde comer
Aunque la oferta gastronómica en Hondarribia es muy variada, aunando tradición con vanguardia, no podéis visitar la villa sin probar el famoso «Pintxo Pote». El Pintxo Pote es una tradición local que combina la degustación de pintxos con bebidas a precios especiales. En el barrio de la Marina existe una gran variedad de bares y tascas que los ofrecen. El pintxo pote suele tener un horario limitado, normalmente por la tarde, pero dependerá de la época del año. Nosotros no pudimos resistirnos y probamos unos cuantos, cada cual más delicioso.
En cuanto a los restaurantes, Hondarribia tiene una oferta gastronómica increíble, y ha desarrollado en los últimos años una gran calidad y variedad en su arte culinario, pero los precios no son precisamente baratos. Si no queréis rascaros demasiado los bolsillos, os recomendamos que busquéis alguno de los restaurantes situados en la zona del puerto o cerca de la playa, que son más asequibles que el resto. En todo caso, seguro que disfrutaréis de su excelente gastronomía.
Nuestro recorrido
- Santuario de Guadalupe
- Puerta de Santa María
- Nagusi Kalea
- Iglesia de Nuestra señora de la Asunción y del Manzano
- Plaza de Armas y Parador de Hondarribia
- San Nicolás Kalea
- Guipuzkoa plaza
- Murallas de Hondarribia
- Barrio de la Marina
- Puerto pesquero
- Puerto deportivo
- Hendaia
